El estrés dispara las bajas de las trabajadoras de ‘call centers’
Excesivo número de horas trabajadas, escasos descansos, salarios mínimos, realización de un trabajo psicológico encubierto, cambios de protocolos constantes (sin informar previamente a las personas trabajadoras), centros de trabajo masificados… Estas son las condiciones que sufren las empleadas (la mayoría son mujeres) del ‘call center’, que han llevado a aumentar las situaciones de estrés y a disparar las bajas en este sector, muy por encima de la media de otros sectores en España.
De esta forma, empresas como Konecta en Barcelona, una de las mayores del sector en nuestro país, señalan que en el primer trimestre del año se han dado una gran cantidad de bajas. Konecta tenía en este periodo un total de 1.673 trabajadoras en plantilla: el 52% de ellas han tenido en algún momento una baja (821 personas) y un 16% ha sufrido una incapacidad temporal durante más de un mes.
Resulta indispensable aumentar la actividad preventiva en el ‘call center’ español. Del mismo modo, el personal reivindica mejorar las condiciones de trabajo y facilitar la conciliación laboral, con el fin de evitar que esta lacra siga aumentando y se convierta en un verdadero problema social.