Barbie, una crítica al patriarcado
En principio ir a ver Barbie da pereza. Una se imagina un mundo rosa, cursi y superficial en el que el culto a la imagen y al consumismo están servidos. Eso es lo que representa para muchas personas el producto estrella de Mattel. Sin embargo, la compañía, gracias a la dirección de Greta Gerwig, ha producido una película que da un giro de 180 grados a esta percepción.
Este film muestra, desde el humor, una Barbie muy diferente: que empodera a las mujeres y se muestra combativa contra el patriarcado. La muñeca perfecta, que cumple con los estereotipos estéticos, pasa de ser una figura cosmética a un ser humano, con imperfecciones y sentimientos. Prefiere cambiar su mundo de fantasía, por uno real.
Esta película, entretenida y desenfadada, descubre que el rosa forma parte de un universo multicolor, en el que se pone en valor la superación personal y profesional, y en el que la sociedad se mira al espejo para revelar que las discriminaciones por razón de género no tienen ningún sentido en un mundo que quiere progresar y ser más justo. La virtud de esta película, además de hacernos pasar un buen rato, es sin duda que nos invita a la reflexión.
Margot Robbie y Ryan Gosling son los encargados de dar vida a los clásicos muñecos Barbie y Ken con los que tantas niñas y niños han jugado. Y lo hacen con una interpretación fresca y original, definida por una fuerte ironía y un humor inteligente que hacen de Barbie mucho más que un juego.
