El dilema del verano
Para los españoles que pueden permitirse viajar durante sus vacaciones estivales puede que la decisión más les cueste tomar a la hora de organizar esos días de desconexión tenga que ver con el destino: sobre si prefieren mar o montaña; con el clima, a ver si se deciden por el frío o por el calor; o incluso con las fechas, preguntándose si será mejor emprender la marcha en junio, julio o agosto
No es el caso de Marta. En su familia deben decidir si destinan su presupuesto para el verano en los campamentos y actividades extraescolares de sus dos hijas, Laura y Eva, o si, por el contrario, las pequeñas pasarán los meses estivales en casa de sus abuelos, en una comunidad autónoma diferente a la suya, para así, cuando por fin su madre coja vacaciones, puedan escaparse las tres una semana al extranjero.