Desde el año 2000, el 1% más rico acaparó el 41% de toda la nueva riqueza mundial

Un informe del Comité Extraordinario de Expertos Independientes sobre la Desigualdad Global advierte del peligro de la concentración de la riqueza para la calidad democrática

El primer informe sobre desigualdad, encargado por el G-20 durante la presidencia de Sudáfrica, pone de manifiesto que la alta concentración de la riqueza en manos de unos pocos supone una amenaza no solo en clave económica, sino también en clave democrática.

El estudio, que ha sido elaborado por el Comité Extraordinario de Expertos Independientes sobre la Desigualdad Global, formado por seis miembros entre los que se encuentra el Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, advierte de que los países con elevados niveles de desigualdad tienen “siete veces más posibilidades de experimentar un declive democrático” que aquellos con niveles más bajos.

El documento subraya que entre 2000 y 2024, el 1% más rico acaparó el 41% de toda la nueva riqueza, mientras que el 50% más pobre sólo acumula el 1%. Además, ese 1% más rico vio aumentar su riqueza una media de 1,3 millones de dólares (unos 1,12 millones de euros) desde el año 2000, frente a los 585 dólares (unos 508 euros) de promedio de la mitad más pobre del planeta.

Actualmente, la riqueza de los multimillonarios equivale ya al 16% del PIB global, alcanzando el nivel más alto de la historia. Sin embargo, el 25% de la población mundial, equivalente a 2.300 millones de personas, se enfrenta a una inseguridad alimentaria moderada o grave.

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Desigualdad, Pobreza, Riqueza
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